Al parecer la propiedad dejó de estar a nombre de la cantante.
Este pasado fin de semana, Shakira dejó Barcelona, para iniciar una nueva vida en Miami, Florida, en compañía de sus hijos Milán y Sasha. La cantante compartió por redes sociales una serie de historias y publicaciones explicando que, aunque las cosas no ocurrieron como quería, estaba agradecida con el país en donde vivió muchos años.
Sin embargo, algo que ha llamado mucho la atención es la repentina mudanza, pues si bien, era conocido que la colombiana dejaría España, todo ocurrió de manera apresurada, haciendo que muchos se preguntaran porque este repentino cambio.
Pues según reporta el medio ‘La Vanguardia’ y el paparazzi Jordi Martín, quien ha seguido de cerca a Shakira y Piqué, el responsable de esta decisión fue Joan Piqué, ex suegro de Shakira, quién echo a la cantante de la casa, que ella y el exfutbolista compraron hace once años.
Para volver más polémico el asunto, recordemos que hace unos días el padre de Shakira, William Mebarek, se encontraba delicado de salud, por ese motivo la colombiana aún estaba permaneciendo en España. No obstante, el plan se aceleró debido a que el padre de Piqué le puso un ultimátum a la cantante, más una millonaria indemnización si no se iba lo antes posible de la casa de Barcelona.
Shakira ya no aparece como propietaria
Por otra parte, Jordi Martin, confirmó que tuvo acceso a las escrituras de la propiedad y mencionó que, para su sorpresa, la famosa ya no aparecía como propietaria del inmueble junto a Gerard Piqué. Ahora quien había ocupado su lugar como propietario de la casa fue el padre del exfutbolista.
Todo parece indicar que luego de que Shakira y el exjugador anunciaron su separación, en septiembre de 2022 la casa de Barcelona pasó a manos de la empresa Inversiones BCN Two & Two SL, cuyo presidente es Joan Piqué, dejando fuera a Shakira.
Asimismo, Joan Piqué envió una carta a Shakira donde decía que debía desalojar la casa, por lo que, ante este ultimátum, la cantante tuvo que aprovechar las vacaciones de Semana Santa para acelerar los planes de la mudanza, a fin de evitar pagarle al padre del exfutbolista una multa millonaria si no dejaba la casa.