La marca de lujo se expande en el mercado.
‘Made in France’ es la última adquisición de Louis Vuitton tras abrir dos nuevos talleres para reforzar la artesanía local y el 'savoir faire'.
Con un evento de lanzamiento cuidadosamente orquestado, LVMH abrió dos nuevos talleres en Azé y Vendome, este último ocupando una abadía del siglo XI que fue renovada a un costo de alrededor de 20 millones de euros, según información de Bloomberg.
Al mantener la producción en su país de origen, LVMH evita los problemas de las cadenas de suministro que continúan afectando al sector manufacturero del lujo.
Los artículos como bolsos, cinturones y otros artículos de cuero se pueden fabricar localmente en Francia, en lugar de Italia, donde se fabrican muchos de sus artículos de cuero.
La inauguración
En la inauguración, a la que asistieron el presidente de LVMH, Bernard Arnault, el ministro de Finanzas de Francia y otros medios de comunicación de prestigio, Arnault dijo que existe un entorno económico "favorable" en Francia, que es el más atractivo de Europa para las inversiones extranjeras. “Nuestras artesanas a menudo fabrican productos que tienen listas de espera”, informó Bloomberg.
El taller Azé es un atelier de 6.500 m² mientras que la abadía de Vendome alberga 3.300 m² de sus marroquineros especializados en la fabricación de bolsos de lujo. Los dos sitios emplean actualmente a 150 personas.
Según un comunicado de prensa, se deben realizar cerca de 350 operaciones para fabricar un bolso Vuitton. Estas técnicas y conocimientos deben ser dominados por los nuevos empleados, dijo Michael Burke, CEO de Louis Vuitton. Para su contratación, los candidatos pasaron por una fase de pruebas de simulación, durante la cual se pusieron a prueba su destreza, su agudeza visual y su capacidad de concentración. Luego, los candidatos seleccionados reciben capacitación interna durante varios meses, el tiempo necesario para adquirir todas las habilidades. Se tarda entre doce y dieciocho meses en ser independiente.
Abrirán dos talleres más en 2022
Tras un año récord en 2021 con una facturación de 64.000 millones de euros, la marca Vuitton abrirá dos talleres más en Francia en los próximos meses. Uno, ubicado en Beaulieu-sur-Layon en Maine-et-Loire, se agregará al existente. El otro se encuentra cerca de Valence, en Drôme. “Para 2024, Louis Vuitton creará 1000 puestos de trabajo adicionales”, anunció Valérie Dubois, directora de fabricación de artículos de cuero de Louis Vuitton para Francia.
“La fortaleza de nuestro grupo es ser parte del largo plazo. Uno no se convierte en diseñador de artículos de cuero en un día, dijo Bernard Arnault, la primera fortuna de Francia y jefe de un imperio de 75 marcas. Hemos conseguido salir de esta crisis económica gracias a nuestra actividad artesanal y a nuestros productos de calidad. Este éxito es una mezcla de pasión, creación, tradición y fidelidad de nuestros clientes”.